Blog post

Prevención del acoso escolar: estrategias para la familia

Sobre este tema los padres tenemos tremenda responsabilidad. Tremenda. Pero como ocurre en el colegio, parece que es allí donde tienen que prevenirlo e intervenirlo. Y sí. Pero en casa también. Porque además, aunque el acoso se ha producido siempre ahora se perpetúa en el tiempo y en el espacio dado que con la aparición de Internet y las redes sociales, también ha aparecido el ciberacoso. Y lo que debemos hacer no es solo enseñar a nuestro hijo a protegerse, a defenderse, no, debemos enseñarle a respetar, a ser empático. En definitiva, debemos hacer prevención del acoso escolar.

Creo que, en general, no nos planteamos mucho este tema, excepto cuando saltan titulares sensacionalistas en prensa y televisión. Así que no hacemos prevención con nuestros hijos. No sabemos enseñarles a resolver conflictos, a “defenderse”. Ni nos planteamos que hay que enseñarles a actuar cuando ven una injusticia. Y, desde luego, sobre lo que no intervenimos preventivamente es sobre que nuestro hijo sea el acosador. Sí, vale, todos decimos que queremos educar a nuestros hijos “en valores”, que ya ni se sabe qué es eso de tan manida la expresión. Pero, a la hora de la verdad… no planificamos la educación de nuestros hijos. Y es que para educar hay que PLANIFICAR sobre qué quiero EDUCAR. Como para cualquier cosas en la vida, vamos: para trabajar, para hacer un viaje, para hacer la compra… Si dejamos las cosas a la improvisación, pasa lo que pasa. Y con la celeridad del día a día, entre lavadoras, demandas del trabajo, rabietas y muchas ojeras… no lo pensamos. Y ya cogemos la inercia y vamos educando sobre la marcha.

Qué es acoso escolar

Según el programa KIVA y Save the children se trata de un comportamiento dañino con las siguientes características:

-deliberado, intencionado

-sistemático y reiterado, que se repite en el tiempo

-dirigido a alguien indefenso o menos fuerte

Es importante recalcar estos aspectos porque llevados bien por la carga emocional de que un hijo sufra, bien por el tratamiento que se da en medios del bullying, en numerosas ocasiones llamamos acoso escolar a lo que no lo es.

NO es una riña, una pelea, un conflicto. Por mucho que nos pueda doler. No es un incidente puntual. Además, implica desigualdad, diferencia de poder por cuestión física, social…

Creo que es importante que nos planteemos que ni todo es acoso, ni son cosas de niños.

Tipos de acoso:

Verbal:

  • insultos, motes… Es el más frecuente.

Físico:

  • agresiones como empujones, patadas, puñetazos… o también de índole sexual

Indirecto:

  • inventarse bulos o difamar a una persona, excluir o aislar o manipular a otros para que lo hagan

Ciberacoso:

  • acoso utilizando Internet o redes sociales para difundir rumores, información personal o imágenes embarazosa, insultar, burlarse de una persona, suplantar su identidad. No comparto en absoluto el concepto “nativos digitales”. A los niños debemos enseñarles a utilizar las nuevas tecnologías. No es lo mismo pulsar a un botón para ver un vídeo, que saber qué vídeo no debo ver, dónde buscar el vídeo que me interesa, qué vídeo no debo compartir (propio o ajeno), qué comentar en un vídeo, cómo asumir o responder (o no) a los comentarios que yo reciba de un vídeo que cuelgue, qué difusión puede tener mi vídeo… Hasta un bebé puede darle al play. Qué digo, bebé, hasta un mono. Eso no es saber utilizar Internet.

Me preocupa particularmente el tema del ciberacoso por su “silencio”, su inmediatez y su omnipresencia.

Roles en una situación de acoso:

Agresor

La persona que inflinge violencia a otro. Puede ser una o varias personas.

Víctima

Aquel que recibe la agresión desde una situación de desigualdad, sin poder defenderse adecuadamente, y de forma reiterada.

Espectadores

Los testigos son los que presencian los hecho y pueden adoptar distintas posturas:

  • ayudantes del acosador: le facilitan la agresión o le ríen la gracia
  • meros observadores: no actúan ni de parte del agresor ni del agredido
  • defensores: ayudan a la víctima

Precisamente con estos último es con los que más hay que intervenir para que TODOS SEAN DEFENSORES. En mi opinión es la vía más corta y educativa tanto para prevenir como para intervenir sobre el acoso escolar: enseñar a los niños que no deben tolerar y mucho menos participar, de la forma que sea, en una situación de acoso. Para ello, hay que hacerles seguros de sí mismos y valientes. Y de eso, entre otras cosas, va lo que sigue…

Prevención del acoso escolar: qué podemos hacer los padres

tus hijos te observan todo el día

Hay cosas concretas pero  lo más importante es el día a día.

En el día a día debemos:

  • No descalificar a nadie por su aspecto físico. Bueno, no descalificar en general.
  • Preguntar a nuestros hijos por cosas del colegio. Que vean que nos interesa su vida escolar. Y no solo en el aspecto curricular de notas y exámenes.
  • Hablar sobre los compañeros de clase. Si detectamos que hay alguno que lo esté pasando mal podemos promover la reflexión en nuestro hijo y promover un comportamiento prosocial en él, de ayuda.
  • Escuchar a nuestros hijos SIEMPRE, vaya que el día que les ocurra algo “importante” no nos lo cuenten porque total, <<nunca me escuchan>>.
  • Dar ejemplo de ayuda y apoyo a los demás. Desde ser agradecidos hasta ayudar a un vecino, familiar… y verbalizarlo.
  • Tratar a nuestros hijos con respeto en todo momento. Esto, para mí, es el Everest de la educación, de la maternidad. Hay cansancio, situaciones tensas, muchas tareas pendientes que mantienen nuestro cerebro en ebullición y hacen que no estemos en el presente. De esta forma es mucho más difícil mantener la calma, ser pacientes y dialogantes cuando el niño no se quiere bañar, no recoge, llora porque está cansado o tiene hambre, se pelea con el hermano… Peso si queremos enseñar autocontrol, habrá que dar ejemplo.

Programar áreas educativas

Como he comentado anteriormente, tenemos que planificar la educación de nuestros hijos para no desaprovechar oportunidades para educar (los momentos más chungos son los mejores, aunque también los más difíciles). Es decir, es fundamental tener claro sobre qué quiero educar (con mayor o menor intensidad según la etapa de la vida de la criatura), para hacerlo de forma intencional.

padre e hijo en columpio estrategias educativas

Estos son los aspectos básicos, en mi opinión, para educar previniendo el acoso escolar:

  • Fomentar la inteligencia emocional: validar las emociones sin negarlas ni decir que son malas. Todas tienen su lugar. Enseñar a gestionarlas y expresarlas adecuadamente.
  • Potenciar la autoestima de nuestros hijos. Esto puede prevenir que se convierta en un acosador (por eso de la mejor defensa es un buen ataque), puede conseguir que sea un niño con recursos para protegerse, y promueve la seguridad en uno mismo para defenderse o defender a otros.
  • Trabajar la empatía: propiciar la reflexión sobre cómo se sienten los demás en diversas situaciones, hacerles pensar cómo se sentirían ellos en determinadas circunstancias, enseñarles a pensar en a quién se están dirigiendo en cada momento.
  • Propiciar la asertividad, en nosotros y en ellos. Enseñar a defenderse adecuadamente: decir no a aquello que no les guste, solicitar asertivamente que cesen en determinada conducta, buscar ayuda en caso de que no pueda resolverlo solo. Lo de “si te pega le pegas más fuerte” como que no.
  • Enseñar a usar Internet adecuadamente y controlar y supervisar el uso de la tecnología y redes. No me refiero a enseñarles a usar Word o a hacer búsquedas en Google, sino a usarlo con cabeza. Por supuesto dar acceso cuando reúnan unos requisitos mínimos de edad y madurez.
  • Enseñar a nuestro hijo a adoptar un rol adecuado en el caso de que sea espectador: AYUDAR a la víctima. Y este punto es FUNDAMENTAL. Si todos nuestros hijos tienen valores para entender que alguien está sufriendo y recursos para actuar el acoso no se llega a producir porque esos comportamientos se penalizan socialmente. Y es que, como hemos visto en el apartado de roles, el acosador no suele actuar solo.
  • Trabajar el concepto de justicia. Con ello, conseguiremos erradicar el palabro “chivarse” y nuestros hijos se sentirán respaldados para denunciar este tipo de situaciones tanto si las están viviendo ellos mismos como si son otros las que las padecen.

Nadie quiere que su hijo sea acosado y nadie quiere que su hijo sea acosador. De hecho debe ser muy duro reconocer en tu hijo a un niño o adolescente que trate mal a los demás, sobre todo si pensamos que lo hace con alguien más débil. Pero, si llega el momento, se trata de buscar soluciones más que culpables, de reconducir más que de penalizar.

¿Educáis intencionalmente en estos aspectos? ¿Os preocupa el tema?

También te pueden interesar estos post:

Os dejo algunas páginas por si queréis recabar más información.

Haz clic para acceder a guia_acoso_ciberacoso_savethechildren.pdf

Haz clic para acceder a yo_a_eso_no_juego.pdf

http://www.compartirenfamilia.com/como-actuar-si-nuestro-hijo-es-un-ciberacosador

https://www.caib.es/sacmicrofront/archivopub.do?ctrl=MCRST97ZI163278&id=163278

https://kidsandteensonline.com/

¿Te ha gustado este post? ¡Compártelo!

Comments (2)

  • Lorena Santamaria

    abril 3, 2018 at 11:32 am

    ¡Qué importante es la prevención!Y que miedo me da este tema…Ójala nunca hubiese que hablar de estos temas. Gracias por los consejos, sobre todo en el día a día a veces se nos olvida cuidar nuestras expresiones y aunque parezca que no nos escuchan se quedan con todo.

    1. Nuria

      abril 9, 2018 at 7:19 pm

      Gracias a ti por leerme. La verdad es que educar exige más concentración que pilotar una nave espacial jajaja.

Publicar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Entrada anterior Entrada siguiente

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies
ACEPTAR

Aviso de cookies