Blog post

El primer cumpleaños (lo que creí que sería y lo que ha sido)

El primer cumpleaños ha llegado. El primero de muchos, el más celebrado y el que menos recordará.

A lo largo de este año han pasado muchas cosas, buenas, malas y regulares. De muchas tengo entradas pendientes por escribir.

El parto ya lo conté; ampliamente ya que la experiencia fue más larga que un día sin el pan que El Santo debió traer bajo el brazo (que aún lo andamos buscando pero nos conformamos porque él es más bueno que el pan) aquíaquíaquíaquí y finalmente aquí.
De la lactancia aún no he hablado pero, cuando empiece, me dará para bastante el tema.. También podría escribir algo sobre percentiles, ese demonio conceptual, que estuvieron bastante presentes durante meses ya que El Santo, que ahora se viene comiendo lo suyo y lo de su prima, no engordaba nada de nada. El cuadro madre gorda-hijo canijo era para verlo. Afortunadamente yo cada vez estoy más delgada y él más gordito. Otro post interesante, o no, podría ser sobre hitos evolutivos. Pero casi me da más pereza que el de los percentiles, jejeje. Estoy harta de que al decir la edad le/nos examine/n, aunque sé que, en realidad, es por desconocimiento. Ejemplo:
-“Ohh, qué guapo, es de anuncio (esto siempre pasa, no es solo orgullo de madre) ¿qué tiempo tiene?” -“Gracias. Tiene 4/ 6/ 10 / casi 12 meses”
-“Anda, ¿ya toma cereales/ se sienta/ gatea/ camina o dice alguna palabra?” (para cada mes su “tiene que hacer esto”)
“Pues no/ no/ no/ no/ no, no. No tiene prisa, jeje”

A este paso, fracaso escolar, vamos. No sé qué prisa hay. Mientras avance, no se estanque y mucho menos retroceda… Y, ¿no dicen que el tiempo pasa rápido? Pues mejor que no lo haga todo a la voz de ya que así más tiempo le tendremos como un bebé tiernecito.

Pero, me voy del tema. Que yo he venido aquí a hablar de mi libro año. He aquí lo que pensaba y lo que ha sido este primer año que en gran parte explica el porqué del sobrenombre de El Santo.

 

Pensamiento
Realidad
A los 6 meses se sentará.
Tardó algo más.
Voy a darle el pecho sin dudar.
El pecho sí, sin dudar…
Los primeros días estaré obsesionada con “¿respira?”
Di por hecho que por supuesto respiraba.
Cuando se siente me cambiará la vida.
Así fue. Se entretienen más y establecen más contacto.
Nos vamos a pasar el primer año en urgencias.
Ni una vez. Solo ha estado un poco malito, que tampoco mucho, en una ocasión. Los mocos y toses varias sabemos que no los despediremos hasta primavera.
Me van a dar mucho la tabarra con consejitos.
Pues no ha sido para tanto, o es que yo paso mucho. Pero si ha dado para algunas quisicosas.
Va a llorar y llorar y llorar.
No y no y no. No es nada llorón
Espero llegar a un año de lactancia y luego se acabó.
Hoy se ha cumplido el año y cada vez le veo menos sentido a dejarlo aunque no creo que la prolonguemos muchos meses más pero, quién sabe.
Se le deformará la cabeza si no le cambio de postura.
Cambia que te cambia cada vez que tocaba comer. Por si acaso. Je,je,je.
Verás como nos pone de cacas y pises en los cambios de pañal.
Solo una vez se hizo cacota (en el endredón de un hotel, sic) y otra pipí. Vamos, que ni abona ni riega.
No dormiremos nada.
Excepto algunos días en verano y el regalito de Navidad, un mes durmiendo peor que mal, ha dormido muy bien y del tirón.
Tardaremos dos horas en salir de casa.
Esto que tenía tan claro, porque todo el mundo lo dice, aún no lo hemos entendido. Tampoco se tarda tanto.
Nos echará la pota encima.
En una ocasión a su padre, pero solo medio cuerpo.
Cambios de pañal a las 3 de la mañana.
Solo durante las primeras semanas y lo hacía a propósito para que se despertara y comiera, que no había manera.
Cambios de sábana de madrugada por escapes de cacota/pipote o pota.
En ninguna ocasión.

Mi experiencia de este año es que, como casi todo lo nuevo que afrontamos en la vida, parece más difícil de lo que luego es (aunque hay bebés más demandantes o situaciones personales y familiares complicadas). Como suelo decir, es peor pensarlo que hacerlo. La maternidad se observa como una escalada en pendiente constante. Puede que porque nos lo hagan creer así. Obviamente supone renuncias, abandonar el egoísmo, no hacer prácticamente nunca lo que te apetece, tener paciencia infinita, madurar, responsabilizarse. En este sentido sí es un tostón, para qué nos vamos a engañar. Pero en este ascenso, hay multitud de descansillos: sus sonrisas, verles dormir, observar sus piececitos y manitas, flipar con cualquier monería que hagan, darte cuenta de cómo evolucionan, reírte viendo fotos antiguas y plantearte ir al oftalmólogo porque no sabes cómo demonios podías ver tan precioso a “eso” que era tu hijo, ser un chapas absoluto narrando cualquiera de sus, para ti, proezas, admirarte de todo lo que haces y que jamás imaginaste que harías, retozar en la camita todos juntos, hacerle cosquis y alucinar con lo suavitos que son, sentirte más querido por ver la adoración que tíos, abuelos y amigos íntimos le profesan.

La última moñerreflexión es algo que me sorprendió mucho: sentir su dolor. Cuando se puso algo malito podía prácticamente sentir su malestar; cómo le molestarían los moquetes, qué pinchazos tendría con cada tos… Esto, NUNCA me había pasado. Por supuesto cuando El Santo sénior, mis padres o cualquier persona a la que quiero enferma me da pena, pero no siento lo que sentí. Supongo que eso debe ser amor de madre.

¿Te ha gustado este post? ¡Compártelo!

Comments (12)

  • nueve meses y un día después

    agosto 31, 2017 at 1:50 pm

    El primer cumpleaños ha llegado. El primero de muchos, el más celebrado y el que menos recordará. A lo largo de este año han pasado muchas cosas, buenas, malas y regulares. De muchas tengo entradas pendientes por escribir. El parto ya lo conté; ampliamente …

  • Cristina Sánchez (Bienvenida mamá)

    agosto 31, 2017 at 1:51 pm

    Ay que me pasó el día y yo sin felicitarte… Felicidades!! A mi me pasaron muchas cosas como a ti, sobre todo lo de los hitos, estoy del “ya anda no? ” hasta la mismísima… Igual que de los virus, suerte que tienes que no pasasteis por urgencias, aquí no las pisamos hasta los 8 meses, pero desde esa llevamos una carrera… Un beso enorme al santo y a la santa senior, porque en el fondo también es nuestro cumpleaños como mami!!

    1. nueve meses y un día después

      agosto 31, 2017 at 1:56 pm

      Desde luego que es nuestro cumple porque ese día es para no olvidar, jejeje.
      YA mismo llega la primavera y leoncito está bueno buenísimo.
      Gracias por comentar.
      Un besito

  • Lai PV (Así piensa una mamá)

    agosto 31, 2017 at 1:51 pm

    feliz cumple algo atrasado…tenemos peques con casi el mismo cumpleaños. Ahora es cuando el tiempo empieza a correr más rápido, cuando te vas a cansar el doble cuando empiece a caminar, cuando echaras de menos ese bebe quietecito, cuando se te caera la baba con cada palabra (es broma…solo era para seguir con lo del “examen” por edades) Tu a disfrutarlo y listos un abrazo!

    1. nueve meses y un día después

      agosto 31, 2017 at 1:56 pm

      Ja,ja,ja! Pues sí, todo eso llegará, pero cuanto tenga que llegar 😉 Felicidades también a tu peque y a ti!

  • brujita tapita

    agosto 31, 2017 at 1:52 pm

    El primer año es increíble! Luego viene el segundo hijo… y el tercero, y nada es igual. Yo me recuerdo tan pardilla… Y coincido contigo en lo pesada que es la gente con “con seis meses ya gateará, ¿no?” Porque la primera, por ejemplo, se puso de pie casi a los nueve meses (igual es que yo no la dejaba…), la segunda a los 6 y medio y con las dos la gente tuvo que opinar: la primera muy tarde, la segunda muy pronto, se le iban a torcer las piernas (WTF?!?!?!?!?). Así que con este tercero (que ya se pone casi de pie solito) no pienso decir ni mú.

    1. nueve meses y un día después

      agosto 31, 2017 at 1:55 pm

      Segundo?? Terceroooo? Tú estás to crazy! Ja,ja,ja.
      Tu primera y tu segunda me parecen mega precoces poniéndose de pie tan pronto! Di que sí, lo mejor es contar lo menos posible.

  • Sonia Del Faces

    agosto 31, 2017 at 1:52 pm

    Muchas Felicidades por el primer añito! Otro mito: te pasará como un suspiro…A mí no me ha pasado muy rápido, aunque es cierto que hay muchos quehaceres, quizás por los madrugones, no sé…besitos!

    1. nueve meses y un día después

      agosto 31, 2017 at 1:55 pm

      Ay, Sonia, pues me ha pasado como a ti. Ahora echo la vista atrás y digo, un año, qué rápido. Pero, en realidad no. De hecho hubo alguna época que se me hizo eterrrrnaaaaa. Je,je,ej.
      Gracias por pasarte y comentar.
      Besos

  • Diana Oliver

    agosto 31, 2017 at 1:53 pm

    Suertaza con lo de llorar y ponerse malito 🙂

  • Krika Alcaide

    agosto 31, 2017 at 1:53 pm

    La gente que es muy pesada con eso de los “hitos” pero vamos, que haces bien, pasando que es gerundio. Un beso para el cumpleañero 😉

    1. nueve meses y un día después

      agosto 31, 2017 at 1:55 pm

      La verdad es que sí. Doy gracias toooodos los días.
      Gracias por comentar.
      Un beso

Publicar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Entrada anterior Entrada siguiente

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies
ACEPTAR

Aviso de cookies